miércoles, 19 de diciembre de 2007

Visitando la Iglesia de Concepción


Cuando escuchamos que en Concepción había mucho trabajo, mi esposa Daisy y yo nos miramos, ambos pensamos en la misma idea. Primero fue ella en Octubre, junto a Diana Arrué, y llegaron tan animadas y viendo que hay tanto por hacer que también me inspiré definitivamente para ir, hoy veo que Dios lo hizo. Pedí unos días de vacaciones y nos hicimos a la aventura. El resultado de esta experiencia fue renovador para nuestra fe, asombroso para nuestros corazones y significativo para nuestras vidas.

Lunes en la noche, salimos al Terminal Sur animados imaginando como sería, yo por mi parte alucinando con conocer la U. de Conce. Mientras viajábamos confirmamos nuestra llegada. Martes en la mañana, Rodrigo Morales y Cristian Guajardo nos recibieron en su departamento, y tomamos desayuno juntos. Con mi esposa oramos, porque Dios trabajara esa semana, nos diera fe y fortaleza.

La primera charla: Pude conocer a María José la primera universitaria bautizada allá, estaba Rodrigo y luego llegó Cristian. Mientras compartíamos la fe muchos nos dijeron que era mala semana en que habíamos ido porque era de “certámenes” (pruebas) y todos tenían que estudiar, pero gracias a Dios ese día llegaron tres invitadas. El ambiente de la charla fue muy ameno, eso nos animó. El día Miércoles, salimos para la universidad en la mañana, oramos en el campus, le pedimos a Dios que hiciera algo que animara nuestra fe, Daisy oró porque Dios duplicara o triplicara el número de visitas a la charla, y lo que Él hizo supero nuestras expectativas: fue increíble, hubo trece invitados, y con todos quedamos en contacto.

Tuve el privilegio de conocer a Robinson, el primer discípulo bautizado en la iglesia de Concepción. Compartimos la fe juntos, él, mi esposa y yo. El Jueves, la vara estaba alta, sin embargo le pedí a Dios que siguiera animando nuestra fe, sabíamos que era difícil tener más que los trece invitados del día anterior, pero esta vez queríamos que nos impactaran los corazones de los invitados. Así fue. Mientras evangelizábamos en el campus, Cristian y yo hablábamos a alguien cuando de pronto escuchamos unas voces: “¿Dónde es la charla?”. Ninguno de nosotros recuerda haber invitado ese día a esas dos estudiantes que fueron a la charla, Lumi y su compañera. Además de ellas llegó Vanessa que quedó muy contenta, y fue al día siguiente y también el Domingo al servicio con 2 invitados, al servicio fue también un caballero que invitamos en la micro.

Jueves en la noche, reunión de familia en Talcahuano. Delia nos recibió cariñosamente en su casa y fue una alegría ver a sus hijos y nueras y su nieta.

El Viernes, estaban regando los jardines a la hora de la charla, el entorno estaba hostil para invitar, pero los hermanos perseveraron invitando en el Casino de los Patos, llegaron cuatro visitas a la charla que hizo Cristian.

La conclusión: “La cosecha es mucha y los trabajadores son pocos”. En total en la semana tuvimos 23 invitados en las charlas bíblicas, a pesar de que era semana de certámenes. ¡Dios permitió que fuéramos en esa fecha y el mostró su poder! Aparte de los que fueron a las reuniones o charlas había mucha gente abierta. Nuestra pregunta es “¿y quien los puede convertir en discípulos ahora? ¿quien les enseña la Biblia para llevarlos al bautismo?”

Hermanos es evidente que Dios tiene parte de su pueblo allá, pero esos trabajadores esforzados ¡son pocos!, esperamos que esto los inspire a conocer nuestra querida “Iglesia de Conce”.

Patricio y Daisy.

miércoles, 28 de noviembre de 2007

Charlas Biblicas Universidad de Concepcion


Todos los Viernes a las 13.00 hrs, te esperamos en el patio interior del “Casino Los Patos” en el campus de la Universidad de Concepción para conversar, estudiar y buscar juntos como aplicar la palabra de Dios en nuestras vidas. Ven y participa de una charla bíblica que te ayudará a conocer más profundamente a Jesús y como vivir un cristianismo más puro.

"Yo soy el camino, la verdad y la vida —le contestó Jesús—. Nadie llega al Padre sino por mí. Si ustedes realmente me conocieran, conocerían también a mi Padre.

(Juan 14.6-7 NVI)

Contactos:
Patricio- 08-2897060
Rodrigo - 09-6206311

Discipulos en Parque Tumbes-Talcahuano


Después de varios meses Dios nos permitió conocer uno de los lugares preferidos de nuestro querido hermano Robinson (el primero en la foto de derecha a izquierda). Disfrutamos juntos una tarde maravillosa, compartiendo lo que Dios ha hecho en nuestras vidas, fruta y sandwiches y la amistad que tenemos en Cristo. Desde hace mucho tiempo Robinson quería que pudiéramos conocer este parque que está ubicado no muy lejos de su casa en la ciudad de Talcahuano. Es un lugar hermoso, desde el cual se puede ver el mar. La alegría y gratitud de nuestro hermano es algo que nos anima a todos, especialmente nos anima verlo tan cambiado. Es evidente para todos los discípulos de la iglesia de Concepción y también para la propia familia de nuestro hermano, como Dios ha obrado en su corazón y en su carácter. Robinson es hoy un hombre que se alegra de tener una vida nueva, la esperanza de ver a Dios en el cielo y la oportunidad de dar testimonio de las maravillas de Dios a quienes le rodean.
Hermano, gracias por animarnos con tu alegría y por el amor que siempre nos transmites.

Como un grano de mostaza


"Jesús continuó: El reino de Dios se parece a quien esparce semilla en la tierra. Sin que éste sepa cómo, y ya sea que duerma o esté despierto, día y noche brota y crece la semilla. La tierra da fruto por sí sola; primero el tallo, luego la espiga, y después el grano lleno en la espiga. Tan pronto como el grano está maduro, se le mete la hoz, pues ha llegado el tiempo de la cosecha. También dijo: «¿Con qué vamos a comparar el reino de Dios? ¿Qué parábola podemos usar para describirlo? Es como un grano de mostaza: cuando se siembra en la tierra, es la semilla más pequeña que hay, pero una vez sembrada crece hasta convertirse en la más grande de las hortalizas, y echa ramas tan grandes que las aves pueden anidar bajo su sombra.»" - (Marcos 4.26-32)

Cuando Jesús comenzó su trabajo misionero, su ministerio contaba con un solo miembro, el mismo. Pero Jesús no estaba solo, el Espíritu de Dios estaba con el (Lucas 4.1). Con eso bastaba para saber que su ministerio sería un exito total. Su mensaje parecía un tropiezo para algunos y una locura para otros (1 Corintios 1.23-24) Pero su mensaje estaba lleno del poder de Dios.
Aún cuando Jesús comenzó solo, con el tiempo muchos comenzaron a seguirlo y así se formó su iglesia.
Dos fueron las claves principales que dieron exito a la misión de Jesús: Depencia de Dios y Enfocado en cumplir la misión.
Como sus discipulos debemos imitar su vida. Mientras Jesús vivió en la tierra dependió de Dios en oración para no ser vencido por la tentación (Mateo 26.41; Hebreos 5.7). Además debemos siempre recordar que la mayor necesidad de las personas es escuchar el mensaje de Jesús (Marcos 1.37-38) y no debemos detenernos hasta llevar el mensaje a toda criatura (Mateo 28.18-20; Marcos 16.15; Hechos 1.8)

La semilla ya ha sido sembrada en Concepcion, estamos viendo los primeros frutos (Robinson y María José) de lo que será un gran cosecha. Ahora el grupo de discipulos en Concepción parecen una pequeña semilla, pero esta va a crecer "hasta convertirse en la mayor de las hortalizas"

Estamos convencidos, aunque no lo vemos todavía (Hebreos 11.1), que lo que Dios ha comenzado en Concepción con este pequeño grupo de discípulos será algún día una gran iglesia que mostrará la gloria y el poder de Dios en esta hermosa ciudad del sur de nuestro pais.
Para Dios sea la Gloria, Amen!