Iglesia Internacional de Cristo de Concepción
Chile
"Pero cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes, recibirán poder y serán mis testigos ... hasta los confines de la tierra." Hechos 1.8 NVI
sábado, 14 de diciembre de 2013
sábado, 15 de enero de 2011
Razón 1: La Honestidad de La Biblia
Queremos compartir con el mundo virtual una serie donde hemos profundizado sobre 10 Razones para Creer en la Biblia (fuente: http://archivos.rbclatino.org/creer/2rs/index.html) Esperamos que sea de utilidad:
Razón 1: La Honestidad de La Biblia
La Biblia es despiadadamente sincera, se dice también que es “dolorosamente honesta”, bien se sabe que muchas estrategias de propaganda se basan en hacer públicas las virtudes de los productos, pero nada hablan de lo malo. La transparencia de las sagradas escrituras se puede apreciar en lo autentico de los escenarios y las personas que nos va mostrando.
La sinceridad de la Biblia es un argumento valioso a favor de su inspiración. Los autores humanos que intervinieron por disposición e inspiración divina en la redacción de los sagrados registros, jamás ocultaron sus caídas ni sus debilidades, aunque hubieran podido hacerlo, pero hasta los más admirados héroes bíblicos son expuestos a la típica y corriente humanidad, las narraciones bíblicas están repletas de lo cotidiano, perfectamente conjugado con lo divino.
Muestra a Jacob, el padre de su pueblo escogido, como un engañador, eso podría no parecer conveniente, pero es mostrado tal cual sin ninguna clase de secretos.
La Biblia describe a Moisés, el dador de la ley, como un líder inseguro y evasivo (Éxodo 4:1, Éxodo 6:30) que en su primer intento de ayudar a su propio pueblo, mató a un hombre y luego huyó al desierto para salvar su vida (Éxodo 2:11-15).
Retrata a David, no sólo como el rey, general y líder espiritual más amado de Israel, sino también como uno que tomó la esposa de otro hombre, Urías, y luego, para cubrir su propio pecado, conspiró para matarlo.
“Entonces David ordenó que la llevaran a su presencia, y cuando Betsabé llegó, él se acostó con ella. Después de eso, ella volvió a su casa.” ... “A la mañana siguiente, David le escribió una carta a Joab, y se la envió por medio de Urías. La carta decía: «Pongan a Urías al frente de la batalla, donde la lucha sea más dura. Luego déjenlo solo, para que lo hieran y lo maten.»”
2 Samuel 11
Jonás es otro ejemplo que la Biblia es honesta con nosotros, revela los pensamientos de desobediencia de un hombre que no aceptaba que Dios perdona a cualquiera que tome una actitud de volver atrás de su mala conducta, el prejuicio de Jonás es visible muy claramente.
“Pero Dios le dijo a Jonás: ¿Tienes razón de enfurecerte tanto por la planta? - ¡Claro que la tengo! le respondió. ¡Me muero de rabia!”
Jonás 4:9
Las Escrituras acusan al pueblo de Dios, la nación de Israel, de ser tan malvada que en comparación con ella hacía parecer buenas a Sodoma y a Gomorra (Ezequiel 16:46-52). La Biblia presenta la naturaleza humana como hostil hacia Dios. Predice un futuro lleno de problemas, advierte que la vida cristiana no es fácil, y que ser buena persona no garantiza ninguna clase de buena fortuna. Enseña que el camino al cielo es estrecho y el camino al infierno ancho. Las Escrituras abiertamente no fueron escritas para aquellos que desean respuestas simples ni una visión optimista y fácil de la religión y la naturaleza humana, nos muestran que Dios no pretende engañarnos sino que nos muestra las reglas desde el principio, no es un contrato con letra chica, la Biblia es consecuente con un Dios verdadero, la Biblia es verdadera, sincera y puramente honesta.
“Desde tu niñez conoces las Sagradas Escrituras, que pueden darte la sabiduría necesaria para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús. Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra.”
2 Timoteo 3:15-17
sábado, 16 de octubre de 2010
Conferencia de Universitarios
jueves, 19 de agosto de 2010
Visita a Santiago (Servicio Especial)
domingo, 1 de agosto de 2010
Conferencia de Mujeres: "Mujer: Renace a una vida plena"
martes, 11 de mayo de 2010
Serie: Las Bienaventuranzas
Amigos de Concepción queremos invitarlos a nuestra serie sobre las Bienaventuranzas, queremos aprender juntos acerca de lo que Jesús nos ha querido mostrar en lo que fue el comienzo del sermón del monte.
Mateo 5:1-11 (NVI)
1 Cuando vio a las multitudes, subió a la ladera de una montaña y se sentó. Sus discípulos se le acercaron,2 y tomando él la palabra, comenzó a enseñarles diciendo:
3 «Dichosos los pobres en espíritu, porque el reino de los cielos les pertenece.
4 Dichosos los que lloran, porque serán consolados.
5 Dichosos los humildes, porque recibirán la tierra como herencia.
6 Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados.
7 Dichosos los compasivos, porque serán tratados con compasión.
8 Dichosos los de corazón limpio, porque ellos verán a Dios.
9 Dichosos los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios.
10 Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque el reino de los cielos les pertenece.
11 »Dichosos serán ustedes cuando por mi causa la gente los insulte, los persiga y levante contra ustedes toda clase de calumnias.12 Alégrense y llénense de júbilo, porque les espera una gran recompensa en el cielo. Así también persiguieron a los profetas que los precedieron a ustedes.